martes, 24 de septiembre de 2013

DE MENDIGO A MILLONARIO

Sarmiento después de toda una temporada, se fue con las manos vacías del Centenario y con pocos argumentos como para pretender que otro hubiese sido su destino. Su condición de invicto no lo hacía invulnerable, pero significaba un respaldo de solidez y confianza que se dio de bruces contra la realidad “Taninera”. No solo dejó los tres puntos y el invicto en su propio estadio, el conjunto de Dechat, sino que proyectó una imagen de equipo anodino y sin variantes. Todo eso fue legítimamente capitalizado por un rival que, pese a las limitaciones individuales, apeló a una convicción colectiva para el elogio. Falta un mundo, todavía, para ver en qué lugar estarán parados en la parte final de la temporada, allí cuando se consolidan los equipos. Sarmiento por ahora solo tiene la prepotente ambición por el ascenso, pero en el primer partido no se dio cuenta de que el juego se le escurría de las manos. En este juego, las asimetrías no siempre se imponen en el resultado final. Sarmiento llegó con el respaldo de un plantel de jerarquía como para anotarlo en la no numerosa lista de equipos a quedarse con el ascenso; enfrente estaba el humilde Fontana, en plena reconstrucción y con un técnico como Eric Acosta, que tuvo que armar un nuevo modelo, después de haber perdido gran parte de la base de la temporada anterior. En la primera mitad, la paridad se expresó en el despliegue del equipo visitante, que procuró incomodar a Sarmiento y reducirle los espacios para cortar los circuitos de creación. El “Decano” nunca le tomó el pulso al rival. Alegre recuperaba, pero Maidana la entregaba mal. Arce y Brizuela, a pesar de sus cambios permanentes de sector no desequilibraron, y por ende Adorni y Verdún arriba, fueron meros espectadores. Fontana como buen alumno aplicado, fue prolijo y obediente, pocas veces se soltó en ataque, y cuando lo hizo creo peligro ante una dubitativa defensa local. Roberto Urbina, Romero y Arbués trabajaron muy bien en el medio, al cual después se sumó Estepa por izquierda para dar una mano en los pocos momentos críticos que tuvo. Un tiro libre de Arce que Aquino sacó con dificultad al tiro de esquina, un remate de Alegre en el travesaño; y la mejor acción colectiva entre “Pitón” Urbina y Estepa, para el remate cruzado del ex Sarmiento, fue lo poco que mostró la etapa en ofensiva. El segundo tiempo más allá de algunas acciones de peligro, fue una sintonía casi calcada de lo que ocurrió en el primero. Poco juego, mucho roce y casi nada de fútbol. En este contexto siempre fue Fontana el que tuvo las mejores chances para convertir, como el remate que dio en el poste de Bogado. Sarmiento tuvo dos en los pies de Cabrera y en la cabeza de Basso. Sobre el final, en una de las tantas escapadas de Estepa (para éste servidor la figura del partido) remató y su tiro se fue abriendo hasta llegar a los pies del juvenil Almirón, a esta altura ya una especie de Robin Hood, que tirándose al piso casi como para recuperar un balón, alcanzó a tocarla y la mandó al fondo del arco, para consumar ante la sorpresa de todos, el “robo” de puntos al millonario. Quedaba tiempo, algo así como 5’ más. Sin embargo, no hubo respuestas contundentes de Sarmiento, que siguió siendo un equipo apresurado y que mostró su lado menos creativo. Confundido, el conjunto de Dechat, no tuvo la reacción esperada para, al menos, alcanzar el empate. Fontana cerró el partido con autoridad y sin zozobras. Así redondeó una victoria inesperada, pero no menos justa, que lo templa desde el arranque, a la vez que sembró de dudas a quien asomaba como uno de los mejores de la clase.

viernes, 24 de mayo de 2013

LA DESILUSIÓN DE SARMIENTO

Cuesta analizar solo el partido ante San Martín, porque ahora sí, y no antes, hay que hacer un análisis general de la temporada, tratar de encontrarle un porqué a la desilusión que vivió el hincha; ese que se levantó a las 6 de la mañana, se fue a trabajar, y rápidamente a la salida se “escapó” para Formosa a ver el partido a pesar del frío y la lluvia; o ese que se privó de una siesta reparadora para escuchar el partido por la radio; o en definitiva el hincha genuino que acompañó durante todo el año.

Los replanteos hay que hacerlos a partir de ahora “dirigentes”, y no una semana atrás con decisiones erróneas de echar al técnico que mayor cantidad de puntos le dio al equipo en los últimos años, y aún cuando todavía existían reales posibilidades de clasificación. Los propios dirigentes de Sarmiento, cercanos al fútbol, fueron los primeros que tiran la toalla antes de tiempo. Fueron los mismos que instalaron la idea que el plantel estaba mal físicamente siendo neófitos en la materia, cuando el equipo ganaba todo.

En éste análisis deberíamos excluir el tema presupuestario que manejó el club, al menos desde la parte que la asocia estrictamente a los resultados deportivos; no siempre gana el que más plata tiene. Es cierto que debe haber un combo de cuestiones, pero en este sentido Sarmiento lo que tuvo, lo manejó bien, esto es: viajó con anticipación, en buenos micros, fue a muy buenos hoteles, concentró el tiempo necesario. Estos son los ponderables que soluciona el dinero, y en este item, el club no “tiene la culpa” de tener un mayor ingreso que otro planteles, ahora en la cancha siempre serán once contra once.

El propio plantel también deberá hacer su autocrítica pública, no porque los periodistas necesitemos su palabra para llenar espacios en la radio o en los diarios, sino para que le expliquen a la gente porqué no se llegó al objetivo trazado cuando todo marchaba sobre rieles. Ahora, tiene que ser una autocrítica seria, responsable, y no excusarse en los arbitrajes, que te perjudican es cierto, pero en otras te benefician, porque son malos dirigiendo en muchos de los casos, pero no corruptos, y si lo son habrá que comprobarlo cosa que es muy difícil de lograr.

“La única verdad es la realidad”, decía el General Juan Domingo Perón; y éste plantel ante San Martín, en el partido más importante de la temporada no estuvo a la altura de las circunstancias. Jugadores con muy bajo rendimiento que tiraron por la borda todo el gran trabajo hecho en la primera fase. Punto aparte para las expulsiones, ante los formoseños la forma en que se hicieron echar Cáceres y Arce hace mucho ruido, no se pueden “borrar” de esa forma dos referentes y jugadores indispensables para el equipo. Lo de Arce es más discutible, especialmente la segunda amarilla que el árbitro le saca por una supuesta mano, pero Arce lo “sacó” al árbitro con sus protestas reiteradas en los 18’ que jugó. Pero la “perlita” de Cáceres fue la gota que llenó el vaso, a la vista de todos le aplicó un codazo terrible y criminal a Benítez, Quiroga ni alcanzó a sacarle la roja cuando el delantero ya caminaba hacia el vestuario. Una locura, esto no le puede pasar a dos kilates como ellos con su experiencia a cuestas.

Se puede perder y quedar eliminado, pero dando todo, como lo hizo el equipo ante Juventud Unida la fecha anterior, creando innumerables situaciones de gol que luego por circunstancias del juego no entraron o por la gran actuación del arquero. Pero ante San Martín en el segundo tiempo y con el resultado en contra por el gol sobre el final de la primera parte de Oscar Giménez; Sarmiento pateó una sola vez al arco y fue el remate de Adorni que sacó el arquero por sobre el travesaño. Esto es también lo que hace ruido en el ambiente Decano, jugadores que dicen querer quedarse en la institución porque están cómodos, sin embargo en el partido clave de la temporada fallaron de una manera estrepitosa. El único que se salvó del incendio fue Mauro Alegre.

Sarmiento fue ayudado por todos los resultados habidos y por haber, ya parecía algo increíble que el equipo dependa de sí mismo faltando dos fechas y cuando no había podido ganar en las otras cuatro jornadas. Fue beneficiado por el propio San Martín, que ganaba 1 a 0, y tenía dos hombres más para jugar el segundo tiempo, sin embargo el “Franjeado” también se hizo echar dos jugadores como Benítez y Coronel en 17’, y se complicó ante la lesión del arquero Antonio. Lo dijo el propio Bandiera: “Si nosotros no ganamos no importan lo que hagan los demás”; el tema es que todos se empeñaron en ayudarlo al Decano, pero fue el propio equipo sarmientista el que no se tendió la mano.

Ahora sí tendrá que venir el tiempo del balance exhaustivo de lo que pasó, para barajar y dar de nuevo, pero con otras cartas y no con estas que quedaron marcadas en la piel del hincha por la desilusión. Vendrá el tiempo de la contratación del nuevo técnico, con él llegarán nuevos futbolistas y se irán otros tantos, el hincha volverá a esperanzarse con la nueva temporada; pero mientras tanto habrá que explicar qué pasó con un equipo que tenía todo para pegar el salto del ascenso y falló contundentemente en su propósito.

lunes, 15 de abril de 2013

LEJOS EL MEJOR

El mote le cabe para Sarmiento y su paso arrollador en esta primera fase del Torneo Argentino B. El equipo de Chaparro fue netamente superior a todos sus rivales, y salvo contadas ocasiones se vio superado en el juego.
Luego de un comienzo infortunado con dos derrotas sobre el lomo, Capitano dejó el equipo y se hizo cargo el formoseño para poner las cosas en su lugar, acomodar cuestiones tácticas básicas en el equipo dentro de un buen plantel, más la autocrítica de los jugadores sacaron a flote una situación con comienzo lamentable.
Habíamos expresado en su momento que aquella presentación con derrota ante Textil Mandiyú fue humillante y echa técnico si se tratara de una fecha 10 de campeonato, sin embargo la despedida de Capitano no tardó en llegar en la siguiente jornada, no solamente por el rendimiento del equipo, sino porque nadie lo bancaba ya al entrenador rosarino.
Llegó Chaparro y con él fue la vuelta del grupo de dirigentes antagónicos en el “Decano” conocido como los “Dinosaurios” a manejar cuestiones del plantel y la vida institucional del club. Anteriormente a esto su participación era casi nula. Chaparro fue acercado por Horacio Muñoz, pero fue concensuado entre todos los “Dinosaurios”, quiénes no querían cometer nuevamente el pecado capital de traer un entrenador costoso y con demasiada “chapa”. El “Tuti” era un viejo anhelo de esta parte de la dirigencia, pero a quién no hubieran ido a buscar bajo ningún punto a comienzo de campeonato.
El equipo comenzó a levantar ostensiblemente su performance en el torneo, prueba de ello que elaboró una cadena de victorias y jornadas sin derrotas de 18 partidos consecutivos, hasta que cayó en Formosa ante San Martín, pero ya en las puertas de la clasificación que logró en la siguiente fecha goleando a Comunicaciones.
Lo que logró Chaparro que tuviera Sarmiento, es una identificación en su juego, el equipo sabe perfectamente a qué juega, y más allá de los cambios de nombres, la estructura táctica y el concepto se mantienen. Igualmente el equipo tiene afianzado los titulares, y de no haber cambios por lesiones y expulsiones, está definido.
Aquello que parece tan simple de pasarle la pelota a un compañero y que se muestra como la regla básica cuando se habla de fútbol, hoy es muy complicado de hacerlo. Sarmiento es un equipo paciente, aguerrido y explosivo. Sabe tener la pelota con intérpretes muy capacitados como Arce, Scatularo, Maidana en su momento antes de la lesión; es fuerte defensivamente con tres hombres que pasan poco al ataque pero que a medida que transcurrió el campeonato se fueron acomodando casi a la perfección como: Correa, Centurión y Marín. Y es explosivo y dinámico cuando la tiene Brizuela, el tipo que va a los bifes y le impone el cambio de ritmo cuando el equipo lo necesita. Arriba está Cáceres, lo trajeron para hacer goles y está respondiendo con creces, ya hizo más que el año pasado.
En el medio de todo este panorama a Chaparro y su cuerpo técnico quisieron imponerle un nuevo preparador físico aduciendo que el equipo que sacó 10 puntos de ventaja se caía en este sentido en los segundos tiempos. Parece increíble, pero estos rumores que fueron ganando la opinión pública, nacieron desde la propia dirigencia del club, y de los mismos que lo fueron a buscar a Chaparro. No soy machista, pero el comportamiento de los dirigentes pareció propio de una mujer histérica.
Estos dirigentes que a viva voz afirman que quieren ascender, son los que ponen los palos en la rueda por cuestiones de vedetismo personales. La pregunta cae de maduro, ¿Se quiere ascender negando la posibilidad de entrenar al plantel en su propio estadio porque hay un partido de Copa Argentina?, esto sucedió después de haberle ganado claramente el clásico a For Ever. ¿Se quiere ascender cuestionando al entrenador que trajeron con cuestiones absurdas?. ¿Para qué vino Alexis Gasparin, el profe rosarino?, si ya sabemos a tomar unos tests a los jugadores; pero fue tan tomada de los pelos esa decisión que llegó en un momento en que los jugadores titulares estaban haciendo una mini pretemporada, por ende era fehaciente que los resultados no iban a dar óptimos. Los profesionales entendidos en la materia aseguran que los tests hay que hacerlos al comienzo y al final de los trabajos físicos exigentes y no durante, en fin. Aquí se opina de todo y con una liviandad asombrosa.
Como en todo matrimonio que se pone un proyecto en común, hay que ceder cosas: los dirigentes tendrán que tener protagonismo en otro sentido, en la tarea que a ellos les concierne y no “meter” la cuchara en temas que tocan de oído. El cuerpo técnico tendrá que afianzar conceptos y corregir detalles para llevar al equipo a la gloria. Y el hincha apoyar desde su lugar, hoy salvo el partido contra For Ever, el hincha le dio la espalda al equipo no concurriendo al estadio.
En este barco que vislumbra el ascenso, todos tienen que tirar para el mismo lado; es absolutamente cierto lo que expresa Chaparro a cada instante, “..Hace mucho que Sarmiento no está como ahora”. Pero para concretarlo todos tendrán que estar en la misma vereda y encarar para el mismo lado, de lo contrario todo será en vano.

martes, 18 de diciembre de 2012

DIEZ PELÍCULAS PARA HINCHAS DEL FÚTBOL Y DEL CINE

Es tiempo de vacaciones, y para aquellos que ya empiezan a extrañar la pelota, les dejamos una forma no del todo desdeñable sobre el mundo del fútbol.
Llegan las vacaciones y si bien uno está preparando el bolso con artículos de playa y recreación absoluta, en el “futbolero” de ley nunca puede faltar un buen libro, o en este caso las recomendaciones sobre 10 películas que tratan sobre el deporte que más nos apasiona.

Evasión o victoria (1981)
John Huston (Director) introdujo el fútbol como excusa en una trama carcelaria, de fugas intrigantes que contenía un reparto peculiar. Los actores: Sylvester Stallone, Michael Caine, Max Von Sydow y la superestrella brasileña Pelé. Sin ser una obra mayor, ofrece una visión aceptable de este deporte.

Quiero ser como Beckham (2002)
El director de origen indio Gurinder Chadha buceaba en el poder del fútbol y lo que significaba para dos jóvenes muchachas. Una procedente de la India, donde la tarea no es nada fácil y más teniendo como objetivo jugar igual que su héroe David Beckham. La otra, su descubridora que la invita a unirse al equipo de fútbol femenino local, donde compartirán su sueño y su pasión por el fútbol. Es una película emotiva, reflexiva y muy inteligente. La inclusión del fútbol no desdeña para nada a la historia en la que está perfectamente integrado.

Once pares de botas (1954)
Damos un salto temporal para retroceder a una época donde el fútbol era muy distinto pero que levantaba igualmente pasiones. El cine español está salpicado de capítulos futboleros, y uno de los más reseñables es esta película de Rovira Beleta con los inolvidables José Isbert o Mary Santpere. El fútbol o la novia, una difícil elección que tiene que plantearse el protagonista, un futbolista aspirante al éxito con una legión de fans femeninas que despiertan los consiguientes celos de su novia. Comedia, fútbol y con la participación de estrellas de la época como Di Stefano o Zarra.

Matías, juez de línea (1995)
Película muy personal y austera, dirigida a la par por Santiago Aguilar y Luis Guridi que sirvió para reflejar una historia muy futbolera y entrañable. Una comedida simpática, amable y ácida, a mayor gloria de Carlos de Gabriel, quizás sobre la que se sostiene en exceso el film.

Maradona, la mano de Dios (2007)
No era para menos. La deidad argentina del fútbol, tras años de un fútbol admirado como venerado en tono religioso, ha tenido un documental, a cargo del realizador Marco Risi, que se basa en la vida del astro argentino. Imágenes inéditas de sus inicios, mezclado con escenas de ficción, y con aprobación del propio protagonista, la película es un buen trabajo para reflejar la grandiosidad de Maradona.

Galatasary-Dépor (One day in Europe) (2005)
El alemán Hannes Stöhr mezcla varias historias que tienen como telón de fondo un partido de la Champions League. Es una cinta sencilla, sin muchas pretensiones pero bien resuelta, con buen gusto y en la que se intenta reflejar una realidad en Europa con el fútbol como excusa. No es que sea el balompié el protagonista, pero no deja de estar presente en toda la película.

Días de fútbol (2003)
De nuevo el cine español se aproxima al fenómeno futbolero y David Serrano logra una comedia con momentos hilarantes. Buena culpa de ello tienen sus inspirados actores. Héctor Alterio, Alberto San Juan, Fernando Tejero, ponen su chispa para provocar sonrisas cómplices y no sólo en el buen aficionado al deporte rey. Diálogos magníficos con buenos actores y situaciones divertidas para una película que sin ser una maravilla resulta agradable y cómica.

Shaolin Soccer (2001)
Una mezcla muy explosiva y que causa reparos desde su propio título. Artes marciales y fútbol en un cóctel explosivo con tintes fantásticos y en tono de comedia. Eso no parece fácil de digerir, pero la película es una auténtica curiosidad que consigue arrancar sonoras carcajadas. No se toma en serio para nada y eso logra convertir esta historia en una comedia de culto. Conocemos a Sing, discípulo de un Shaolin, cuya ambición es popularizar el kung fu, hasta que se encuentra con Fung un futbolista fracasado con el que forman un equipo que mezclará fútbol y kung fu. Recomendable.

Rudo y Cursi (2008)
El mexicano Carlos Cuarón narra con acierto la historia de dos hermanos bien diferentes, uno con aspiraciones de cantante y el otro de futbolista que desean llevar a cabo sus sueños respectivos y triunfar, para salir de su penosa situación económica. Una rivalidad muy bien reflejada con la química de sus actores protagonistas Diego Luna y Gael García Bernal, hay una buena participación de Guillermo Francella. Tampoco es que sea una cinta soberbia, pero las escenas de fútbol están muy bien rodadas y justificadas.

The Dammed United (2009)
Quizás es la película que más y mejor ha conseguido reflejar el mundo del fútbol en el cine. Es fútbol es el protagonista, a través de un capítulo de rivalidad entre entrenadores británicos. Un ritmo frenético, contada con intriga y mucho interés que logra, además un brillante trabajo del británico Michael Sheen. Refleja con mucho realismo el fútbol desde backstage, en los vestuarios, en los despachos, en los entrenamientos. Tiene un sabor auténtico y un interés bastante notables.

martes, 30 de octubre de 2012

EL REGRESO DE SAN MARTÍN

San Martín de Margarita Belén se aproxima rápida e inexorablemente a la conquista del torneo Clausura de la Liga Chaqueña de Fútbol, es que con 30 puntos en su haber, sacó una diferencia más que apreciable sobre sus inmediatos perseguidores, que cada vez le allanan más el camino hacia la gloria.
¿Tendrá un final aburrido el campeonato?, sin la incertidumbre que marca una definición palmo a palmo hasta los últimos minutos del juego en la última fecha. Todo dependerá de Don Orione, que es el único equipo que le puede dar pelea, una lucha desigual es cierto por la cantidad de puntos que los separan, pero el conjunto de Eric Acosta, por el momento es el que abriga una esperanza.
Porqué el retorno de San Martín, a lo que seguramente será su consagración en éste campeonato. Porque el conjunto de Ariel Canizini, técnico con el cual ya gozó las mieles del éxito ascendiendo a primera división en 2007 y logrando el campeonato Apertura y Oficial en 2008, en su presentación en el máximo torneo doméstico, volvió a acomodar las piezas en su lugar.
San Martín y Canizini, parecen ser un combo inseparable, cada vez que se hable sobre el CV de alguno de ellos inmediatamente aparecerá la figura del otro protagonista asociada. Más allá de la breve incursión del técnico por For Ever y Cune, donde es director deportivo; Canizini sabe que por siempre estará ligado a los colores del “Chacarero”. Y toda la comunidad sanmartiniana de Margarita Belén, sabe que Canizini es el DT ideal para el equipo.
Luego de la frustración por no haber participado en el Torneo del Interior de éste año, donde estaba clasificado pero desistió de participar a último momento por temas económicos; el DT jugó un papel preponderante en el rearmado del equipo, pero principalmente en concientizar a sus futbolistas para volver a ser aquel equipo que practicaba un muy buen fútbol desde la B, y que logró mantener en la A, para conseguir los logros ya mencionados.
En ese Apertura 2008, San Martín reunió 31 puntos sobre los 28 de Resistencia Central, para conquistar el título, algo realmente impensado. Mucho más después conseguir el Torneo Oficial a manos de Villa Alvear, que se había consagrado en el Clausura.
Después llegó la malaria para San Martín, pero la malaria en serio; no solamente en cuánto a resultados, sino que pasó de ser el equipo sensación de la Liga, a ser el más violento. La agresión de Alfredo Barlessi al árbitro Gustavo Giménez, marcó un punto de inflexión en esa ola de violencia en la cual se vio inmiscuido todo el plantel. San Martín salía más a pelear los partidos, literalmente, que a jugarlos. Pensaban que todo el mundo estaba en su contra e intentaban repeler esas cuestiones con acciones irresponsables, rayanas con la falta de disciplina. Fueron fechas nefastas, en las cuales en todos los partidos un hombre de San Martín se iba expulsado.
Puede ser cierto también, que estas reacciones vinieron luego del deceso de Diego Barlessi, jugador del club y hermano de Javier, Damián y Alfredo; lo ponemos en potencial porque son razones que rozan más con lo psicológico y es un terreno en el cual prefiero no meterme para no navegar en aguas desconocidas. Lo bueno es que Alfredo, un jugador de excelentísima condiciones, reconoció su error, y si bien es cierto que todavía purga con la sanción que le impuso el Tribunal de Disciplina de la Liga, puede convivir hoy un poco más aliviado con su pena, y la ilusión de un pronto retorno a las canchas.
Retorno al que también está llegando el equipo, por eso el título de esta columna. Y en esto tuvo mucho que ver Canizini, en su vuelta al club, luego de la transición de Fabián “Colo” Enríquez, lo primero que me dijo en una charla informal que tuvimos, fue “tenemos que volver a instrumentar la disciplina en el plantel, material humano hay de sobra, pero los jugadores tendrán que entender que no podemos sufrir expulsiones todos los partidos, en eso tendremos que trabajar”.
Y trabajó, y más allá de la desilusión por no participar en el TDI de éste año, San Martín supo rearmarse y volver a confiar en su fútbol. Quizás este equipo no luzca tanto como aquel de 2008, pero otra diferencia marcada es la versatilidad en el plantel, ya que Canizini por diferentes motivos (expulsiones, lesiones, tácticas) ocupó a casi la mayoría de los jugadores, y todos rindieron jugando dos competencias al mismo tiempo (Liga y Federativo).
San Martín está de vuelta señores, más allá del título casi inminente en éste Clausura, lo importante fue que volvió por sus propios fueros, recompuso su imagen y hoy ostenta con amplio margen la punta del campeonato.

martes, 9 de octubre de 2012

LA NECESIDAD DE VOLVER A CASA


“Volviendo a casa estoy” reza una de las canciones, de los grandes éxitos de Rata Blanca; quizás varios integrantes de éste plantel de Sarmiento no conozcan el tema musical, ni siquiera algunos al grupo. Para nada sonó este tema en el vestuario exultante y ganador, pero en muchos aspectos esa letra se asocia con lo que vivió el “Decano” en la tarde calurosa y húmeda de un lunes feriado.
“Voy, voy regresando hacia mi hogar, la noche está llegando…..” Desde el 18 de abril, día en que Sarmiento jugó ante Racing, no se ocupaba el Centenario, para un partido oficial, ni amistoso, luego de quedar trunco el clásico de las Américas entre Argentina y Brasil. Justamente por este partido, la dirigencia “Decana” privó a su equipo de jugar en su cancha.
Sarmiento necesitaba retornar a su casa, volver a sentirse seguro y cobijado; tan necesario era volver, como la victoria contundente que le brindó a su gente, a su público de bien, ese que va a alentar sanamente y se amarga ante cada desilusión, pero sin tirar proyectiles para suspender partidos.
“De ti beberé un poco de paz, es todo tan veloz, ven por favor…..Ángel, ella es un ángel, tiene la llave que devuelve la ilusión. dame, dame un instante, te necesita mi cansado corazón...el fuego no se apagó.” casi un grito del plantel, llamando a la ansiada victoria, sin saber reitero, quizás, las estrofas de Rata Blanca.
Sarmiento había arrancado muy mal el campeonato, con durísima derrota ante Textil Mandiyú, pese al escueto resultado adverso, el equipo fue una lágrima ante los correntinos; y no pudo rectificar el rumbo ante Fontana, pese a que mejoró su producción futbolística. Lo demás, es reciente, la salida de Capitano, la llegada de Chaparro, y el empate ante For Ever.
“Soy quién desespera por llegar, y recorrer el barrio, y encontrar caminos que extravié. Tú sabes que es duro progresar….” El “Decano” retornó al barrio, y a pesar de la medida absurda de ir a comprar entradas con DNI, se sintió protegido por sus fieles hinchas, y empezó a encontrar quizás, tal vez, el camino, que pareció haberse extraviado en el comienzo.
Al menos Chaparro, ya lo expresó, “empezó a encontrar el equipo”. Hay dudas aún, por supuesto, el arquero es una de ellas; Arias es hoy el titular, pero no tiene asegurado el puesto. Cabral por derecha en la defensa es una fija, al igual que Correa por el centro. Uno imaginaba también a Centurión en esa condición, pero el formoseño no está pasando por su mejor momento, y asoma con insistencia Benítez. El lateral izquierdo es otra de las dudas, Marín y Córdoba, pelean por el lugar, aunque da la sensación que el morocho cordobés le impone más confianza al DT.
En la mitad de la cancha el panorama es más claro; Brizuela juega por derecha. Por izquierda creo que Chaparro encontró la solución con Scatularo; y el enganche o doble cinco es Arce. El volante central es un puesto que tiene a dos jugadores locales en altísimo nivel como Maidana y Alegre, veremos quién se queda finalmente con la posición.
En la delantera hoy por hoy los titulares son Adorni y Cáceres. A Bandiera le terminó jugando una muy mala pasada su expulsión ante Textil Mandiyú, y la salida de Capitano. Con el anterior entrenador su vuelta al equipo ante For Ever, era una fija; sin embargo en la semana previa asumió Chaparro y decidió conservar a Adorni, que tuvo un buen desempeño en el clásico, y ante Colegiales fue una de las figuras del equipo. Le va a costar volver al equipo a Bandiera, más allá que sea uno de los preferidos de la gente; el rendimiento de su amigo y compañero de pieza (Adorni) hoy lo deja afuera.
“Yendo a casa estoy. Volviendo a casa estoy”. Así canto íntimamente Sarmiento; y volvió a casa, para ganar, golear y gustar.

lunes, 1 de octubre de 2012

PUNTO QUE SIRVE

Después de la semana convulsionada que vivió Sarmiento, previa al clásico, el punto obtenido en condición (netamente de visitante) ante For Ever, sirve y mucho para encarar el futuro. Cada vez que el “Decano”, no perdió ante el “Albinegro”, inició remontadas en su rendimiento y en cuestión de resultados, que lo llevaron a posicionarse en los primeros puestos.
Dentro de una semana que se pareció más a un tsunami, que a la preparación de un equipo para afrontar uno de los partidos más importantes de la temporada; Sarmiento tuvo buenas y malas. Repasemos, el lunes empezó convulsionado con la derrota del día anterior ante Fontana, y con los incidentes que impidieron que continuara el partido. Ese mismo lunes, al mediodía, el gobernador convocó a una reunión ampliada del Coprosede, donde se determinó que los hinchas “Decanos” no iban a poder ir más a la cancha en condición de visitantes.
Ese lunes, ni el martes, Salvador Capitano, DT destituido, se presentó a los entrenamientos, producto de su viaje a Rosario, por el fallecimiento de su hermano; se acercaba el final del proceso del técnico. Es cierto lo que afirma Capitano, en una nota a Diario Norte, siempre tuvo el respaldo de Capitanich, pero cómo aseveramos en la nota anterior, Capitano se fue ganando enemigos íntimos, que terminaron por voltearlo.
El martes el plantel volvió al trabajo en doble turno, y luego del entrenamiento vespertino, se les confirmó a los ayudantes de Capitano (Rossi y Villarreal), que no iban a continuar en sus cargos, la idea era producir la renuncia del DT, que no daba señales de vida ante los insistentes llamados del propio Capitanich. Ese día, por la noche, cerca de las 23, la destitución de Capitano era un secreto a voces; y la llegada de Raúl de la Cruz Chaparro, era un hecho hiper confirmado.
El miércoles por la mañana llegó Capitano a Resistencia, pero ya sabía que su proceso al frente del equipo estaba culminado, es más, aquí se enteró que en el club ya estaban abrochando el contrato con el nuevo entrenador, que hizo su presentación por la tarde en el entrenamiento. Fue el día más movido de la semana, con la llegada del ex DT, la aprobación del contrato del nuevo entrenador, la presentación en el entrenamiento, partido oficial por la Liga ante Independiente Tirol, y finalmente desvinculación con Capitano.
El jueves ya se fue ganando un poco más en tranquilidad, si vale el término, fue el primer momento en dónde se empezó a pensar en For Ever, y el clásico del domingo. Por la mañana Chaparro, dispuso un equipo que mantuvo en el amistoso vespertino ante Cune, y allí se empezaba a perfilar el once titular. Fueron los primeros indicios de Chaparro en su flamante conducción, las primeras dudas y certezas. Dudas en el arco, el sector izquierdo de la defensa, y en la delantera buscando el acompañante de Cáceres. La certeza era que a Arce, que había tenido una leve contractura el miércoles, se lo iba a esperar hasta último momento.
El viernes por la tarde, persistieron las dudas planteadas, el equipo quedó concentrado y el DT no confirmó el equipo; recién el sábado por la mañana Chaparro tuvo en claro quiénes iban a jugar el clásico, nombres que confirmó ni bien llegado al estadio de For Ever, el domingo.
La buena noticia de la semana quizás tuvo que ver con la llegada de Chaparro, a hacerse cargo del equipo, el clima convulsionado que rodeaba a Capitano era muy hostil y adverso. La otra buena, y por el momento que se vivía, era la ausencia del público “Decano”, que “liberó” a varias jugadores como a Adorni, por ejemplo, siempre tan resistido por el hincha. Es una medida que no comparto, de ninguna manera, porque muestra la incompetencia de los organismos estatales, se hizo lo más fácil; sin embargo, reitero, creo que esto le vino bien a Sarmiento. Se quitó la presión de encima, y se la trasladó a For Ever.
Ya en el juego, se vio un clásico entretenido, quizás uno de los mejores de los últimos tiempos; Sarmiento estuvo a la altura de las circunstancias, con nombres que rindieron en un nivel superlativo como Horacio Correa, bien acompañado por el resto de sus compañeros, no hubo fracasos individuales, y colectivamente el equipo mostró lo mejor hasta aquí en el torneo.
Por estas razones, que sirven para entender la semana que sobrellevó el “Decano”, es que se justifica el empate que consiguió ante su clásico rival. A partir de aquí tendrá que refrendar lo bueno, y seguir corrigiendo errores.